"A veces hay que ser Zaratustra. Ser cruel"
Mi mano tiembla al sostener el cuchillo. Sobre una tabla espera mi víctima. Al cortar en rodajas se escurre el líquido rojo. ¿Qué diferencia hay entre un jitomate un ser humano? Psicosis, quizás.
Hasta ahora no he matado a nadie, pero existe el deseo, ¿seré impuro?
Me asomo por la ventana, los vecinos caminan, una niña de tal vez siete años juega con una pelota, el resto de los vecinos se aleja. Salgo de casa. Salgo de caza. La niña no me ha visto, ni el conductor distraído.
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